Todos sabemos que cuando no hay viento, no se mueve nada y la mar parece una balsa de aceite (calma chicha). En la vida también existe la calma chicha pero suele ser una etapa muy gris y agónica, tanto o más cuanto más se alarga..., a diferencia de la que ofrece la naturaleza que transmite sensación de paz y armonía.
Fotos: Mascayemas.
5 comentarios:
Muy bonitas las fotos. ¿Podrías desvelar cómo está hecha la primera? No sé si es un fotomontaje o si la magia la has conseguido jugando con la perspectva, pero es curiosísima!
No sé ahora mismo si te refieres a la de las flores (Lirios de mar) o a la de la farola. Si son las flores, lo único raro es que la cámara está a ras de suelo, en paralelo y que obviamente, dado que está oscureciendo, utilicé el flash aunque con muy poca intensidad dada la cercanía de las flores (o habrían salido más quemadas que el zapatero).
Caray Tanit, cuanto tiempo sin verte por estos lares. Bienvenida de nuevo y disculpa si alguno de tus comentarios se me pasa sin contestar. ¡ Son tantas cosas en la cabeza...!.
¿Porqué no te apuntas como seguidor y así recibirías un aviso cada vez que el blog registre novedades?. Como ves, ya tengo 3 apuntados (a dos los tengo controlados, pero el tercero es anónimo).
Sí, me refería a la de los lirios. Imaginé que la fotografía podría estar tomada de esa forma. El resultado es muy llamativo.
Muchas gracias por la explicación y también por la invitación al blog.
A sus piés bella dama (como solía decir pimpinela escarlata).
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